Son, en su mayoría, particulares que se sitúan en los bordes de la ruta oficial, aprovechando los meses de máxima afluencia de peregrinos
Es una polémica recurrente y, con la llegada del verano y una mayor afluencia de peregrinos, el problema se ve incrementado. La Asociación Gallega de Albergues Privados (AGALBER) ha denunciado que cada vez es más habitual ver a personas realizando ventas ilegales -sin la autorización pertinente-, a los peregrinos que realizan el Camino de Santiago, especialmente en las rutas más frecuentadas. En la mayor parte de casos estos productos son bebidas de todo tipo y ciertas comidas.
Son, en su mayoría, particulares que se sitúan en los bordes de la ruta oficial y en ciertas zonas de máxima afluencia. Colocan sus puestos improvisados de venta y no dudan en abastecer a los peregrinos, que en su mayoría compran en estos puesto ambulantes por comodidad. Es muy común ver estos vendedores ilegales en el Camino Francés. AGALBER ha presentado documentos gráficos de estas infracciones; en una de ellas puede verse a un hombre vendiendo refrescos y comida en el remolque de un tractor.
Por supuesto, la Asociación Gallega de Albergues Privados asegura que dicho vendedor, así como otros tantos que se sitúan al largo del Camino, carecen de ningún tipo de permiso. Estos "piratas" serán más numerosos durante los meses de buen tiempo, motivo por el que AGALBER advierte a los peregrinos y piden vigilancia por parte de las autoridades. Recientemente el organismo comunicó sus quejas a responsables de Turismo de la Xunta, quienes ya están actuando en consecuencia.