Los ladrones están aprovechando estos meses para hacerse con gran cantidad de bicicletas, que venden en el mercado negro
El verano es un magnífico momento para realizar el Camino de Santiago en cualquiera de sus rutas: buen tiempo en la mayoría de los días, más afluencia de público y compañeros con los que peregrinar, más vigilancia en las rutas y, por supuesto, aprovechar esos días de vacaciones que nos permiten hacer el Camino sin prisas y disfrutándolo. Sin embargo, son fechas que, por el aumento masivo de peregrinos, los ladrones aprovechan para "ponerse las botas".
En España se roba una bicicleta cada 5 minutos y, por supuesto, el Camino de Santiago es un punto caliente... muchos amigos de lo ajeno hacen el agosto, nunca mejor dicho, durante estas fechas en las rutas jacobeas. Por ello, se recomienda a los peregrinos que vigilen especialmente sus bicicletas cuando hagan un descanso o, por ejemplo, paren en un local a comer o cenar.
Ante el robo, los peregrinos deben llamar a la policía, pero no siempre la acción de los cuerpos de seguridad acaba con final feliz. Las bicicletas tienen mucha salida en el mercado negro, y por lo tanto los ladrones tardan muy poco en deshacerse de la mercancía robada, perdiéndose la pista rápidamente.
Así que ya sabéis peregrinos... cuidado con vuestras bicicletas.