El paseo de Río Louro, que transcurre paralelo a la autovía A-55, es parte del Camino Portugués
Las lluvias abundantes durante el pasado mes de febrero en Galicia provocaron gran cantidad de desperfectos en zonas de la Comunidad, incluyendo el desbordamiento del Río Louro a su paso por la localidad de O Porriño. Este desbordamiento afectó a los alrededores y cauce del río, provocando derrumbes y otros estragos.
Aunque el ayuntamiento contrató a una empresa de limpieza para recolectar miles de restos plásticos y orgánicos que quedaron atrapados en zonas del río y en ambos lados del borde del mismo - adelantándose así a una iniciativa ciudadana; los principales desperfectos siguen esperando a ser reparados. Los daños estructurales, que incluyen derrumbes en la cuenca del río y desprendimientos de grandes rocas del muro de contención, son trabajos que la empresa de limpieza no puede solucionar.
Los vecinos de la zona avisan de lo peligroso que es realizar ahora el sendero que transcurre al borde del río. El problema es que el Paseo de Río Louro, que transcurre paralelo a la autovía A-55, es parte del Camino Portugués y una ruta transitada por decenas de peregrinos al día.