La localidad coruñesa de Arzúa es la penúltima cabeza de etapa en el camino francés, en nuestra peregrinación hacia Santiago.
Arzúa es una localidad situada al sudeste de la provincia gallega de A Coruña. Esta localidad conserva importantes masas de bosque autóctono con robledas milenarias, las cuales son escenario de romerías campestres. Un buen número de celebraciones, tradiciones y leyendas surgen de este entorno, en donde nos encontramos con hasta tres santuarios diferentes (Da Mota, Fonte Santa y San Xoán de Navas), rodeados por los robles milenarios de Arzúa.
Si hemos llegado a Arzúa, prácticamente estaremos terminando el camino hacia Santiago. Arzúa es la penúltima cabeza de etapa del camino francés, la anterior a Pedrouzo y la siguiente a Palas de Rei, situándose a tan sólo 39 kilómetros de la capital gallega.
Esta cercanía con Santiago facilita incluso que algunos peregrinos opten por caminar desde Arzúa hasta el Monte do Gozo, el cual se sitúa ya en Santiago de Compostela, aunque a cinco kilómetros de la catedral. De esta forma, el caminante llega con mayor tranquilidad a la misa del peregrino.
Arzúa cuenta con un buen número de leyendas y celebraciones tradicionales enmarcadas en sus frondosos bosques y sus antiguas construcciones. Una de las leyendas es la llamada "leyenda del peregrino", la cual relata el paso de un hambriento peregrino por la localidad coruñesa. Al llamar a la puerta de una panadería en el que acababan de calentar pan, la dama del local le contestó que no atendían a maleantes, que si quería pan tendría que pagarlo.
El pobre del peregrino tumbó en la puerta de otra panadería del pueblo, en la cual sí le atendieron de forma más fraternal, ofreciendo pan de la semana pasada, puesto que el del día estaba todavía cociéndose. En un momento de descuido, el peregrino desapareció misteriosamente sin dejar rastro, y a la hora de sacar el pan del horno, los bollos de la primera panadería se volvieron de piedra, mientras que los de la panadería hospitalaria, se convirtieron en oro.
Si hay algo por lo que se conoce especialmente a la localidad de Arzúa, es por su famoso queso de la tierra. Este queso tiene la categoría de "denominación de origen" desde el año 1995 y la cualificación de "Producto Gallego de Calidad". El queso de Arzúa se elabora de forma artesanal con leche natural y entera de vaca. Este queso se comercializa en piezas de forma lenticular o cilíndrica que van desde los 0,5KG hasta los 3,5KG.
En honor a este queso, todos los años se celebra la denominada "Fiesta del Queso", una fiesta que se acompaña con actividades artísticas, culturales, humorísticas y folkróricas, en lo que es una clara promoción del producto de la zona.