Este medio de transporte es cada vez más popular y cuenta con muchas ventajas, pero puede que no nos garantice la Compostela al final del Camino
El Camino de Santiago puede hacerse a pie, a caballo, a vela y en bicicleta, pero ¿sabes si cualquier tipo de bicicleta cuenta? Las bicicletas eléctricas son cada vez más comunes, y seguro que más de uno se ha preguntado si es una opción viable para hacer el Camino de Santiago. Desde luego, facilitaría el camino en las etapas con más desnivel. Precisamente por eso, está en tela de juicio que esos peregrinos reciban o no la Compostela.
El Camino de Santiago se trata, en origen, de una muestra de esfuerzo y devoción. Aunque ha cambiado mucho desde la Edad Media, el Camino actual comparte el espíritu de sacrificio de antaño. Por eso se establecen unos requisitos para conseguir la Compostela:
Recorrer 100 kilómetros, si se hace a pie o a caballo
Recorrer 100 millas náuticas y terminar el Camino a pie, si se hace a vela
Recorrer 200 kilómetros, si se hace en bicicleta tradicional
Tener mínimo dos sellos diarios en la Credencial
En estos requisitos no se contempla ningún vehículo a motor, ya que con ellos se pierde ese componente de sacrificio. Los peregrinos que completen su travesía a Compostela en bicicleta eléctrica, por tanto, no podrán obtener la Compostela. Hay excepciones, si el peregrino que la ha usado sufre alguna discapacidad o similar.
La Oficina de Acogida al Peregrino no contempla este tipo de bicicletas, aunque algunos peregrinos piensan que es improbable que comprueben cada una de las bicicletas con las que se completa la ruta. Alrededor del 6% de los peregrinos realizan el Camino en bicicleta, y en lo que va de año se han superado los 148.000 peregrinos. Esto significa que, aproximadamente, se habrían comprobado si 9.000 bicicletas cumplen los requisitos para conseguir la Compostela. Parecen muchas, pero la media es de menos de 25 al día. Es razonable pensar que se vayan a fijar, y que el peregrino que intente colar una bicicleta eléctrica se irá con las manos vacías.
No debemos perder de vista que conseguir la Compostela no es el objetivo del Camino. Hay muchos motivos para realizar el Camino de Santiago: religión, deporte, conexión con la naturaleza o con uno mismo… Si bien la Compostela certifica tu experiencia, no tenerla no resta nada a tu viaje y todos los momentos inolvidables que hayas vivido.
Si para ti merece la pena la bicicleta eléctrica por todas sus ventajas, adelante. Este tipo de bicicletas facilitan mucho la experiencia, que puede ser muy dura tanto por los cientos de kilómetros que dura como por la intensidad de las etapas. Si quieres un documento que acredite que recorriste todo el Camino, siempre puedes quedarte con la Credencial (aunque no tenga el último sello).