Mensaje #7650

Hola de nuevo a tod@s,

En esta ocasión os voy a sobrevolar a través del Camino Francés. Como sabéis el Camino data del medievo, periodo de la historia que abarca 10 siglos, del V al XV. El inicio sobre el que se tienen referencias históricas del Camino de Santiago, datan del siglo XI, aun cuando sean los dos siglos posteriores, XII y XIII en los que tiene su auge y consolidación. Para mi el Camino Frances tiene 3 grandes tramos diferenciados (Iniciación, Columna Vertebral y Finalización). En distancia el inicio a través de Navarra y La Rioja tiene unos 155 km, la columna vertebral, que es Castilla y León, unos 400 km y el tramo final unos 160 km, abarcando desde O ‘Cebreiro a Santiago. Para mi los tres tramos tienen su atractivo per se, y constituyen partes fundamentales de la estructura del mismo, que os paso a comentar.

El primer tramo, arranca a los pies de los Pirineos, Saint Jean de Pied de Port-Francia, situado al sur de Francia y norte de Navarra. De ahí se sube hacia Roncesvalles (en general, punto de inicio para la mayoría de los Españoles) bajando después suavemente hacia Pamplona. Pasas por pueblos con carácter como Zubiri, etc. acompañando al rio Arga hasta la entrada en Pamplona. Desde ahí están las subidas hacia Logroño, pasando por pueblos míticos del Camino como Puente La Reina o Estella. Una vez que abandonas la provincia de Navarra, llegas a la provincia de La Rioja con Logroño, como punto de entrada. El discurrir por La Rioja, aun cuando es relativamente breve, es una maravilla, suaves ondulaciones y viñedos por doquier, atraviesas Nájera, Santo Domingo de la Calzada y Grañón, para rápidamente abandonar La Rioja.

A partir de ahí, entras en la columna vertebral del Camino, la Comunidad de Castilla-León. Son tres provincias, para mi maravillosas, Burgos, Palencia y León. Es cierto que hay alguna etapa pesada, pero en su conjunto, para mi representa la esencia viva del Camino y tiene 3 o 4 de las mejores etapas del Camino, bajo mi humilde opinión. Al poco de entrar en la provincia de Burgos te adentras en los Montes de Oca un maravilloso bosque de unos 12 km donde se libraron las ultimas batallas de los maquis después de la guerra civil y donde no te será difícil ver numerosa fauna ibérica. De ahí vas a Agés muy cerca de Atapuerca en los aledaños de Burgos. Atapuerca es famosa por los hallazgos en la llamada Sima de los Huesos, de alta relevancia científica, al encontrarse restos de homínidos de hace 900.000 años, el llamado Homo antecessor. La llegada a Burgos tienes dos alternativas, o el margen izquierdo del rio Arlanzón, o el polígono industrial…..mi sugerencia evitad el polígono y acceded por el rio. Burgos en sí, es una maravilla, su Catedral (junto a las catedrales de León y Santiago, las tres joyas del Camino), el casco antiguo, su cocina, su rio Arlanzón, etc. parada obligada del Camino.

Cuando sales de Burgos, vas en paralelo al rio por el Paseo del Espolón (no se si sabréis que en los años 20 los burgaleses paseaban por este paseo en tramos claramente diferenciados y estancos, la burguesía por el tramo del casino, los artesanos por la zona media y las clases populares por la zona más alejada de los jardines…) y al poco de salir de la capital, te adentras en un territorio nuevo, ves infinitos campos de cereales son sus gigantes estructuras de riego, las cosechadoras industriales de los agricultores locales y maravillosas iglesias Románicas en el horizonte. Las desiertas carreteras solo usadas por peregrinos con su mochila a la espalda, te van llevando a Castrojeriz. Castrojeriz es un pequeño pueblo, con tres iglesias increíbles, una de las tres con un museo muy interesante.

Después de salir de Castrojeriz, subida de muerte al alto de Mostelares, donde merece la pena madrugar y sentarte en lo alto a ver amanecer, esto es de las cosas a hacer, no te olvides. Recuerda el Camino no es una carrera, es un experiencia vital única a disfrutar sin correr, sin prisas, sentándote a ver “pasar la vida”. La bajada de Mostelares es tremenda y has de bajarla con precaución y en zigzag, para no perder las uñas o dañarte las rodillas. Al bajar llegas a los infinitos campos de girasoles, el granero de España, Tierra de Campos, buscando pueblos cerca de la desconocida y maravillosa Palencia. Entremedias te vas cruzando con ríos como el Pisuerga y otros afluentes del Duero, que refrescan el ambiente en verano y primavera. Llegar a la provincia de Palencia, caminando kilómetros al margen izquierdo del Canal de Castilla, vaya obra de ingeniería hidráulica que se marcó Fernando VI en el siglo XVIII, una verdadera maravilla. Que desconocida es Palencia y que joyas tiene. Frómista (aquí tienes una iglesia del 1.100...), Carrión de los Condes, una joya tras otra. Después tiene alguna que otra etapa un poco mas pesada, Sagunto, Mansilla y la capital León. La provincia de León, otra provincia maravillosa, empezando por su capital, su catedral, su Parador, su ayuntamiento, su plaza mayor, su gastronomía, la animación del centro de la ciudad, etc. Después hay pueblos/ciudades míticas como Astorga, Rabanal del Camino, Foncebadon, etc. que llevan hasta la cruz del hierro y bajada tremenda a la monumental Ponferrada. Después de ahí, a Villafranca y a sufrir con la subida a Galicia. Tienes O’Cebreiro, que te está esperando y que te castiga sin piedad. Has acabado con la columna del Camino.

El tramo final, una vez subido O’Cebreiro, entras en Galicia por la provincia de Lugo, con sitios maravillosos como Sarria y Portomarín, este último una joya en el margen del rio Miño. Más adelante te vas encontrado con algún sitio, que forma parte de mis preferidos, como Ribadiso, un pequeñito pueblo (literalmente un albergue, dos o tres casa y un hotel muy pequeño, bañado por un rio en el que los peregrinos descansan, junto al bar más animado de todo el camino. Aquí la ruta está mucho más concurrida dado que los tres caminos principales, Frances, Norte y Primitivo han confluido en uno. Más allá te espera Santiago de Compostela, antes el monte del Gozo, que te lleva casi en volandas a la Catedral, donde como destino final, te quitas las botas y te entregas al descanso.

Después de pasar por el Centro de peregrinos y coger número para tu merecida Compostela, te vas a la Misa del Peregrino, si hay peregrinos potentes (americanos o japoneses o algún crucero que lo financia), verás el botafumeiro, merece la pena, si no habrás de hacer coincidir tu llegada a Santiago, con las doce fechas anuales en las que hay fijo botafumeiro. Después una gran cena de despedida y hasta el siguiente Camino de Santiago.

Buen Camino!!!.