Cee

Cee ©Panoramio titocives

El recorrido urbano por el núcleo de Cee conduce al peregrino hasta la iglesia de Santa María da Xunqueira, un templo que a pesar de los destrozos cometidos durante la invasión napoleónica, conserva su cabecera gótica. Fue levantado en el siglo XV bajo las órdenes de Domingo de Andrade, excepcional arquitecto oriundo de la población y a quien también se debe, entre otras obras, la Torre del reloj de la catedral de Santiago. Según la tradición la iglesia se levantó en el lugar donde apareció una imagen de la Virgen en medio de unos juncos. Como otro de los principales atractivos de Cee se halla el legado de Fernando Blanco de Lema, su principal benefactor. Nacido en el lugar en 1796, emigró a Cuba muy joven, donde hizo gran fortuna.

Parte de ella la donó a la construcción de un colegio en su localidad natal, un inmueble que aún es, hoy en día, el referente cultural de la villa: el museo-Fundación Fernando Blanco. La mayor parte de la colección consiste en el instrumental científico y en el material didáctico de las cátedras, laboratorios y gabinetes del antiguo instituto. En él se conservan, por ejemplo, balanzas, microscopios o telescopio del siglo XIX. Junto a ello, también alberga muestras de animales, minerales y fósiles así como instrumentos musicales antiguos o distintos fondos artísticos y pictóricos.

La fundación está emplazada en la Praza da Constitución. Abre de martes a sábado, de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 19.00 horas. Este insigne vecino, Fernando Blanco, pervive en la memoria de sus vecinos gracias a la estatua de su figura en la avenida que lleva su nombre y a un instituto también bautizado con sus apellidos. Cerca del museo se encuentra el Paseo de la Alameda, uno de los lugares más agradables para pasear, al acoger emblemáticos y tradicionales edificios del siglo XIX -como la Casa Mayán- con galerías y balcones. Además, los peregrinos que se sumerjan en el casco antiguo de Cee, pasearán por estrechas callejuelas adornadas con fuentes milenarias y casas blasonadas, como el Pazo de Cotón.

Celebraciones Cee acoge durante el verano sus principales celebraciones. Los peregrinos que lleguen a mediados de julio a la localidad podrán tomar parte en las fiestas de San Cristovo mientras que aquellos que arriben al enclave a mediados de agosto asistirán a las de la Virxe da Xunqueira, las principales de la población. Con ellas se rinde honor a la patrona, la Virxe da Xunqueira, con una emotiva procesión. Pero los festejos religiosos se combinan durante varios días con un amplio programa lúdico, lleno de música, oferta gastronómica y atracciones.