Juan Pablo II en el Camino de Santiago: El primer Papa peregrino

Juan Pablo II - Opus Dei Communications/Flickr

Son muchos los personajes históricos que han recorrido el Camino de Santiago, entre ellos, ya conocemos a Alfonso II de Asturias, Alfonso III de Asturias, Santo Domingo de la Calzada y otros personajes ilustres. 

Una gran cantidad de personas influyentes han peregrinado por algunos tramos de la ruta jacobea. En estas menciones no podía faltar Juan Pablo II, el primer papa peregrino que visitó dos veces Galicia y fue el primer Pontífice que lo realizó en Año Santo.

Juan Pablo II fue un Papa que canonizó a 24 beatos españoles y nombró a 8 cardenales españoles en los nueve consistorios de su Pontificado, de los cuales, dos de ellos forman parte de la Curia Romana. 

¿Por qué se le llama "el primer Papa peregrino" a Juan Pablo II?

En el año 1982, Juan Pablo II se convertía en el primer Papa peregrino que llegaba a la Catedral de Santiago . Siete años más tarde, volvía a la ciudad compostelana con motivo de la IV Jornada Mundial de la Juventud. En aquel entonces, recorrió los últimos cien últimos metros que llevan a la Catedral de Santiago y se colocó la característica capa que lucían los peregrinos. Junto a él,  se encontraba el cardenal Ángel Suquia, un arzobispo de Santiago de Compostela que ejerció durante 10 años. 

El objetivo del Papa Juan Pablo II de llegar a la catedral era dar a conocer el Camino de Santiago por todo el mundo, algo que logró con creces y atrajo a miles de peregrinos. Juan Pablo realizó cinco viajes a España, y en dos de ellos visitó la comunidad gallega. Después del primer viaje de Juan Pablo en el año 1982, hubo que esperar casi tres décadas hasta el viaje de Benedicto XVI en 2010 a la catedral de Santiago en año Xacobeo.

Juan Pablo II y sus visitas al Camino de Santiago y Galicia

La primera visita que realizó Juan Pablo II a Galicia comenzó en un viaje que emprendió durante diez días por toda España. Durante su expedición visitó diferentes ciudades españolas: Madrid, Ávila, Salamanca, Toledo, Sevilla, Granada, entre otras.

Una vez llegó a la ciudad compostelana, ofició la Misa del Peregrino en el aeropuerto de Lavacolla, y horas después celebró un acto europeísta en la catedral. En él, aludió a las raíces cristianas de Europa y rezó ante el sepulcro del Apóstol Santiago.

Durante su visita, el Papa aseguró sentirse atraído por este país y su “fidelidad a la Iglesia y servicio a la misma, escrita en empresas apostólicas y en tantas grandes figuras", que perduró en los momentos más difíciles.

En 1989, volvió a Santiago de Compostela con motivo de la IV Jornada Mundial de la Juventud, donde saludó a millones de jóvenes y les pidió que no olvidarán el legado histórico del Xacobeo y que mantuvieran su fidelidad en la fe católica.