Iglesia y Torre de los Clérigos

Iglesia y Torre de los Clérigos - Wikimedia Commons / Deensel

Cuando hablamos del Camino Portugués y de la ciudad de Oporto como punto de partida para realizar este itinerario, no podemos obviar los lugares más emblemáticos de esta ciudad. Y es que además de su encanto innato, hay lugares como el Puente Don Luis I y la Iglesia y Torre de los Clérigos que todos los turistas deberían visitar.

El conjunto arquitectónico más famoso de Oporto

A petición de la Hermandad de los Clérigos Pobres, el pintor y escultor italiano Nicolau Nasoni comenzó la construcción de esta iglesia en 1732, dando lugar así al inicio del conjunto arquitectónico que se convertiría en su obra más representativa.

La iglesia, que mezcla estilo barroco y rococó del norte de Portugal, abrió sus puertas por primera vez en 1748 sin estar del todo terminada, y tras numerosas construcciones y reconstrucciones, se dio por terminada treinta años después, en 1779.

En su fachada podemos encontrar una clara división en dos niveles y en la parte superior un frontón con forma de zig-zag. Por su parte, en el interior apreciamos una galería que supuso toda una novedad en la arquitectura portuguesa, y que más tarde sirvió como inspiración para otras construcciones. Además, cuenta con un retablo de mármol coloreado que plasma claramente el estilo rococó.

Por su parte, la torre, que también es de estilo barroco, se construyó entre los años 1754 y 1763. Con sus 75 metros de altura, se trata de la torre más alta de Oporto, y cuenta con ni más ni menos que 240 peldaños hasta su punto más alto, desde donde se puede disfrutar de una de las mejores vistas de la ciudad. 

La Iglesia y la Torre de los Clérigos se encuentran en el casco histórico de Oporto, y son una visita obligada, ya que se consideran como un emblema de la ciudad. Y si este conjunto arquitectónico ya es llamativo, imagina cómo sería si se hubiese llevado a cabo el diseño original en el que se incluía una segunda torre. ¡Una pasada!