Casco Antiguo de Logroño

Casco Antiguo de Logroño | Wikicommons. Autor: Comakut

Un viaje por la historia, la cultura y la gastronomía

El casco antiguo de Logroño es un auténtico tesoro para los amantes de la cultura y la historia. Hablamos de uno de los rincones más encantadores de España, testigo de varias épocas que van desde la romana, pasando por el Medievo y llegando por supuesto hasta la actualidad. El Casco Antiguo de Logroño supone un punto muy importante para el Camino de Santiago, pues los peregrinos aprovechaban este punto para descansar y abastecerse, aspectos que contribuyeron a su desarrollo y crecimiento. 

Son muchos los datos que hacen tan especial al Casco Antiguo de Logroño. El primero de ellos es la gran diversidad arquitectónica, destacando la Concatedral de Santa María de La Redonda y uno de los mejores referentes de la arquitectura barroca. Por otro lado también destaca la Iglesia de San Bartolomé, que además de ser el edificio más antiguo de la ciudad, es una de las pocas iglesias románicas que se conservan en La Rioja. 

El Casto Antiguo de Logroño va más allá de la historia arquitectónica o su belleza. El lugar se ha convertido también en uno de los puntos claves para la vida nocturna, siendo el corazón para la famosa Calle Laurel y uno de los puntos más famosos de toda España cuando se habla de pintxos y vino, característica que ha convertido a Logroño en todo un centro turístico. 

Pasear por el Casco Antiguo de Logroño es hacerlo por un pedazo de la historia. Sus calles empedradas, la atmósfera que se respira en el lugar y sus edificios dan un encanto único a la zona y en el que la gastronomía, cultura e historia se unen como en pocos lugares.