Bruma-Sigüeiro

Tallas de piedra y otras obras creadas por un taller local sorprenden al caminante en la aldea de Cruz

La penúltima etapa del Camino Inglés, segunda si se ha iniciado desde A Coruña, es de las más llevaderas por la planicie sobre la que discurre y la abundancia de servicios hosteleros que facilitan el avituallamiento. La cercanía de la capital compostelana (42 kilómetros); la escasez de referencias monumentales y la facilidad del tramo hacen que el paso se aligere, raudo hacia Sigüeiro, ya en el municipio de Oroso, a las puertas de Santiago.

Los viales de asfalto y tierra alternan casi a partes iguales durante el recorrido, prácticamente carente de zonas embarradas o pasos dificultosos, salvo un trecho de regatos que aumentan de forma exponencial su caudal con lluvia. Además, una leve pendiente favorable acompaña al peregrino hasta el final de la etapa.

Sí habrá que tener en cuenta que Sigüeiro, a orillas del río Tambre, no dispone de albergue ni se habilita espacio público alguno para los caminantes, así que para hacer noche allí será necesario servirse de un alojamiento hotelero.

La etapa (26 kilómetros)

Si se ha hecho noche en la vecina localidad de Mesón do Vento, habrá que retroceder sobre los pasos, unos dos kilómetros, para retomar el itinerario jacobeo. Sin embargo, los romeros alojados en el albergue público de Bruma (Mesía) amanecen ya al pie del Camino, marcado sobre la carretera que conduce hacia o Seixo. Para desayunar o aprovisionarse, a unos 500 metros desde el albergue hay un desvío a la derecha que conduce al mencionado núcleo de Mesón do Vento, localidad perteneciente al concello de Ordes.

El Camino de Santiago alcanza este último término municipal en la parroquia de Ardemil (23 kilómetros a Sigüeiro / 39 a Santiago), siguiendo una carretera sin apenas curvas hasta llegar al lugar de Cabeza de Lobo y la iglesia de San Pedro, rodeada por el cementerio. Unos metros más adelante, en la aldea de Cruz, se topa el peregrino con el bar Porto, primero del itinerario, y unas llamativas tallas de piedra junto a un arco metálico que soporta dos tractores; un género ecléctico resultado de un taller participado por la asociación cultural Castro da Croa.

Se deja atrás Ardemil por un camino de tierra (derecha) tras haber pasado por los lugares de Carreira, Mámoas y Carballeira. El sendero forestal, de fácil acceso, presenta varios cruces que habrá que desechar hasta llegar al tercero, a la izquierda, pasando por delante de un cruceiro. Pese a las continuas intersecciones, es un tramo bien señalizado que no entraña riesgo de extravío.

Desemboca en el lugar de A Rúa, donde se encuentran dos bares (Café Bar Novo y Bar A Rúa) y la casa rural Dona María, establecimientos que rodean la iglesia parroquial de San Paio de Buscás (19 kilómetros a Sigüeiro). El templo conserva gran parte de su primitivo estilo románico de finales del siglo XII, si bien fue reformado al trazo barroco a mediados del XVIII. Alberga en su interior un retablo con la figura de San Paio, al que los devotos acuden para implorar sanación.

De la carretera principal se aparta la senda más adelante por un camino de tierra (izquierda) para alcanzar el molino de Trabe y el puente de O Cubo. Tiene a partir de allí el itinerario la peculiaridad de que cada cruce de caminos presenta un empedrado de adoquín que marca el rumbo a seguir, además de los mojones y flechas amarillas habituales.

Se alcanza acto seguido un túnel de unos 20 metros bajo la carretera AC-224. Es el lugar de Outeiro de Abaixo y allí se encuentra el romero con la casa rural Antón Veiras, donde se puede dar un capricho por unos 25 euros el menú completo.

En Outeiro de Arriba –el siguiente lugar- se deja a la derecha un sendero que será preciso tomar para visitar la iglesia románica de San Xiao de Poulo.

Sigüeiro

Capilla de Nuestra Señora de la Merced

El peregrino recorre a continuación Senra y Calle (14 kilómetros a Sigüeiro), donde se topa con la capilla de Nuestra de Señora de la Merced y una sencilla vivienda del siglo XVI en la que una placa conmemora el paso de Felipe II en 1554, por ello conocida como Casa de Filipo II. En ese núcleo se encuentra el bar O Cruceiro, último local hostelero hasta llegar al final de etapa.

La misma carretera conduce hacia Carballo y, unos metros más adelante, por un camino de tierra que se toma a la izquierda, se llega a Casanova de Pereiro. Observará el viajero un árbol solitario en una bifurcación. La ruta correcta es a la izquierda. Ese trecho es zona de manantiales en la que no es extraño que la ruta se dificulte por exceso de agua sobre la senda. En tal caso, lo recomendable es vadear el camino por los terrenos laterales.

La siguiente referencia es el Puente Pereira, del que no se ha determinado con exactitud su origen (medieval o romano). Una vez superado, se enfila ya el lugar de Carrás, otra zona que presenta abundancia de agua en el firme.

Con las casas de Baxoia, se interna el Camino en el municipio de Oroso. Son los últimos kilómetros de la jornada y se recorren por pistas anchas de la concentración parcelaria, de rectas considerables y ondeantes repechos.

Finalizado el tramo de tierra, se vuelve al asfalto para entrar ya en Sigüeiro por la zona del polígono industrial. Al centro de la villa de origen medieval (siglo XII) se accede por una zona verde que conduce hacia la calle Real y al puente sobre el río Tambre, frontera natural con el Concello de Santiago de Compostela (16 kilómetros).

Sigüeiro, capital del municipio de Oroso, carece de alojamientos públicos de peregrinos. No obstante es una localidad con todo tipo de servicios.