Pueblos más bonitos de Cantabria para conocer en el Camino de Santiago

Cantabria es un auténtico tesoro que para muchos peregrinos es descubierto una vez recorren el Camino de Santiago. Hablamos de una tierra de paisajes verdes y abruptos acantilados, donde el mar Cantábrico se encuentra con majestuosas montañas, ofreciendo a los caminantes una combinación única de naturaleza, historia y cultura. 

Mientras el Camino de Santiago serpentea a través de Cantabria, los peregrinos tienen la oportunidad de sumergirse en una España tal vez menos conocida, alejada de los clásicos destinos turísticos y descubrir pueblos que conservan la esencia y el encanto del viejo mundo. Te invitamos a un viaje en el que descubrirás algunos de los pueblos más bonitos de Cantabria que, sin duda, enriquecerán la experiencia de aquellos que deciden aventurarse en el Camino de Santiago. 

San Vicente de la Barquera | Wikicommons. Autor: GWansorra

San Vicente de la Barquera

• Etapa del Camino Lebaniego: Comillas - San Vicente de la Barquera
• Habitantes: 4.158

San Vicente de la Barquera es uno de los emblemas más destacados de Cantabria. Un verdadero enclave costero que refleja con acierto el encanto del norte de España. Su posición estratégica, sobre una pequeña península bañada por las aguas del mar Cantábrico, la ha dotado de una rica historia marcada por la pesca, el comercio marítimo y la defensa. Uno de los puntos más destacados es el viejo casco de San Vicente, con sus callejuelas adoquinadas y edificaciones antiguas, conserva un legado medieval que se ve reflejado en monumentos como su impresionante castillo y la Iglesia de Santa María de los Ángeles, ambos vigilantes silenciosos de un pasado vibrante. 

Además de la herencia histórica, San Vicente de la Barquera cuenta con otros elementos impresionantes que atraen a los habitantes y peregrinos. Por un lado la naturaleza, jugando un papel crucial y fundamental en el atractivo del municipio. Destacan también sus extensas playas de arena fina, como la de Oyambre o Merón, convirtiéndose en refugio para quienes buscan el sonido de las olas y la brisa marina. 

Cabañes

• Etapa del Camino Lebaniego: Cades - Cabañes 
• Habitantes: 44 

Cabañes es uno de esos lugares mágicos que vas a encontrar durante tu periplo en el Camino de Santiago. Con apenas algo más de unas decenas de habitantes (sí, has leído bien) hablamos de uno de los municipios más pintorescos de Cantabria. Se calcula que la población de Cabañes alcanza tan sólo los 44 habitantes, pero su ubicación e imponentes vistas lo convierten en uno de los destinos obligados. Y es que esta localidad se encuentra nada más y nada menos que en los Picos de Europa, discurriendo entre él y Lebeña la espectacular garganta del Robejo. Si bien puede que no encontremos las comodidades o servicios de otros pueblos, Cabañes merece una visita obligada por sus impresionantes vistas casi desde cualquier punto de la localidad. 

Laredo | Wikicommons. Autor: Haresgod

Laredo

• Etapa del Camino del Norte: Laredo - Güemes
• Habitantes: 11.148 

Laredo es uno de los destinos más fascinantes para los que buscan combinar historia, cultura y belleza natural. Un claro ejemplo es la playa La Salvé, con más de 5 km de arena fina, es uno de los mayores reclamos de esta villa marinera, pero solo es el inicio de lo que este encantador lugar tiene para ofrecer. Su casco antiguo es otra maravilla, donde callejuelas estrechas y empedradas narran historias de tiempos pasados y edificios con blasones evocan la importancia y prosperidad que esta villa disfrutó en la Edad Media.

Laredo tiene mucho que ofrecer a todo aquel que quiere sumergirse en su naturaleza.  La Atalaya, una montaña que se alza justo al lado de la villa, ofrece unas vistas panorámicas inigualables de la bahía, y es el lugar perfecto para contemplar la magnitud de La Salvé. Las festividades y tradiciones de Laredo, como la célebre Batalla de Flores, aportan un colorido especial a esta localidad, convirtiéndola en un destino imperdible para aquellos que recorren Cantabria, ya sea por el Camino de Santiago o por el simple placer de descubrir los rincones más bellos de esta región.

Comillas | Wikicommons. Autor: Luis Fermín TURIEL PEREDO

Comillas

• Etapa del Camino del Norte: Comillas - Colombres
• Habitantes: 2.156

Comillas es un pueblo que no va a dejar indiferente a ninguno de sus visitantes. Situada en la costera occidental de la región, esta villa es famosa no solo por su belleza paisajística, con sus playas bordeadas por verdes praderas y su pintoresco puerto, sino también por su rica herencia arquitectónica. Los amantes del modernismo encuentran en Comillas un verdadero paraíso, siendo el Capricho de Gaudí, una villa diseñada por el célebre arquitecto catalán, uno de sus más destacados exponentes. Con sus vivos colores y formas inspiradas en la naturaleza, este edificio es un testimonio de la vanguardia creativa de finales del siglo XIX. 

Comillas también es mucho más que Gaudí. Pasear por las calles del municipio es, en muchos sentidos, hacer un viaje en el tiempo, donde cada esquina, cada plaza, tiene una historia que contar. Sin duda, Comillas es un indispensable para cualquier viajero que quiera sumergirse en la esencia más pura y artística de Cantabria. 

Langre | Wikicommons. Autor: SamuPR

Langre

• Etapa del Camino del Norte: Guemes - Santander
• Habitantes: 129 

De todos los municipios mencionados, Langre puede ser sin lugar a dudas el más desconocido para muchos; pero como suele ocurrir, también hablamos de uno de los destinos más cautivadores de Cantabria. Langre es un lugar que deleitará al peregrino, y por supuesto a cualquiera de sus visitantes, que busca una experiencia auténtica con paisajes sobrecogedores. 

Situado en la costa, este pequeño núcleo destaca, sobre todo , por sus impresionantes acantilados y las idílicas playas que se esconden a sus pies. La Playa de Langre, rodeada de altos precipicios verdes y con sus aguas de un azul intenso, es un santuario para los amantes del surf y para aquellos que buscan un espacio de tranquilidad y desconexión. Y es que Langre transmite a la perfección la sensación de estar en un lugar casi inalterado en el tiempo, haciendo de este pequeño pueblo un refugio perfecto para los quieren acercarse a la esencia más pura de Cantabria.