Reportaje

Abrazo al Apóstol Santiago: ¿De dónde viene la tradición?

A lo largo de los años, los peregrinos han terminado el camino abrazando al Apóstol Santiago pero, ¿dónde nace esta tradición?

A la hora de realizar el Camino de Santiago, son muchas las tradiciones que se viven sin importar la ruta que realicemos. No solo se destaca el quemar las botas al final del camino o, incluso, el dejar piedras y cruces a lo largo del camino. También se conoce una de las tradiciones que, en los últimos años, ha sido paralizada por la pandemia y que lleva como gesto el abrazar al Apóstol Santiago.

Son miles y miles de personas las que, a lo largo del año, acceden a realizar este ritual jacobeo con emoción. Sin embargo, ¿cuándo se tomó la decisión de implementarlo? ¿Cuándo se realizó este primer abrazo? Debes saber que su historia se remonta muchos siglos atrás, exactamente hasta el siglo XIII.

¿Qué significa el abrazo al Apóstol Santiago?

Esta tradición jacobea que se vive con gran emoción tiene sus orígenes en el siglo XIII, exactamente en el instante en el que se finalizaron las obras en la catedral en el año 1211. ¿Por qué se produce entonces el nacimiento de esta tradición y no antes? Todo se debe al afán de los peregrinos de sentir la cercanía física de Santiago tras el esfuerzo realizado durante la peregrinación.

Si bien existen muchas leyendas que hablan sobre que esta estatua está realizada en un tipo de piedra que ayuda a recuperar las energías tras el viaje, la realidad es que el abrazo tiene un significado más bien simbólico. Con este el peregrino siente que el Apóstol lo acoge, dando la bienvenida a su casa.

Se trata de un gesto repleto de cariño e incluso íntimo, provocando que incluso algunos de los peregrinos tomen este gesto como una oportunidad para pedir un deseo. Sin embargo, no todos lo ven como un gesto de bienvenida, sino como una forma física de dar por finalizada la etapa del camino.

Sin embargo, hay quienes no se limitan a dar el abrazo al Apóstol. Para todos aquellos que realizan el camino y se encuentran en la Plaza del Obradoiro, se puede comprobar que el abrazo también es realizado entre los peregrinos que han realizado juntos el camino. Una forma de no solo mostrar la ilusión de la experiencia, sino el cariño así como el final de esa etapa.

Apóstol Santiago - Flickr / Contando Estrelas

Apóstol Santiago - Flickr / Contando Estrelas

El origen del abrazo al Apóstol Santiago

Como bien os indicábamos un poco más arriba, el origen de esta tradición nace al final de las obras en la catedral y, desde entonces, la tradición se ha mantenido intacta. La escultura fue situada en el altar mayor, como una forma de transformar el método en el que los peregrinos así como visitantes de la catedral podían moverse por el lugar.

Fue en aquel entonces cuando se tomaron las medidas pertinentes para poder regular la apertura de las rejas donde se encuentra situada la escultura. De este modo, se controla el acceso de los peregrinos para que estos entreguen las limosnas así como daban sus abrazos; un gesto que se mantuvo hasta que en el año 2020 los obispos sustituyeron el abrazo por una reverencia. Una medida tomada debido a la pandemia y la necesidad de extremar precauciones.

Sin embargo, antes de que estas medidas fuesen impuestas, la tradición ha variado en pequeños aspectos. Por ejemplo, mientras que en la Edad Media los visitantes murmuraban al peregrino, un gesto muy común entre los peregrinos franceses. A su vez, también desapareció la costumbre de colocar sobre la cabeza de los peregrinos la corona del Apóstol, un gesto que se tomaba como orgullo de haber cumplido el camino.

El aspecto de la escultura del Apóstol Santiago

Todos aquellos peregrinos o visitantes de la catedral que tienen la oportunidad de verlo, son conscientes del imponente tamaño que la estatua posee. Se trata de una escultura creada en piedra policromada del taller del Maestro Mateo y que, tras la conclusión de las obras de 1211, se optó por situar en el altar mayor.

Esta cuenta con una serie de particularidades. Entre ellas, se puede destacar el hecho de que el Apóstol es representado con aspecto maduro, lo cual se destaca con la presencia de barba y bigote. Este a su vez se presenta entronizado al aportarle cartela y báculo, el cual terminaba en forma de tau.

Este último aspecto destaca por el hecho de que el báculo en forma de tau era un atributo exclusivo de los arzobispos compostelanos como descendientes de los apóstoles. Por ello, esta representación buscaba ser pontifical.

Por supuesto, el paso del tiempo aportó ciertos cambios a la escultura, destacando los cambios de la época barroca. Aquí fue donde se le añadieron el nimbo, la esclavina, el nuevo báculo para el Apóstol y el trono de plata. Una serie de elementos que, a día de hoy, se pueden observar en su actual posición.

Últimos contenidos
Consejos
Curiosidades
La Voz de Galicia La Voz de Asturias

Puntos de interés

Localidades | Albergues | Alojamientos | Restaurantes | Guarnicionerías | Médicos | Puntos de interés | Talleres de bicicletas

Contactar | Política de privacidad | Política de Cookies | Condiciones generales | Aviso Legal | Autoría | Mapa Web | Consentimiento

© Copyright LA VOZ DE GALICIA S.A. Polígono de Sabón, Arteixo, A CORUÑA (ESPAÑA) Inscrita en el Registro Mercantil de A Coruña en el Tomo 2438 del Archivo, Sección General, a los folios 91 y siguientes, hoja C-2141. CIF: A-15000649

Desarrollado y administrado por Hyliacom