Reportaje

El Camino de Santiago para mayores y jubilados

El Camino de Santiago, ¿es recomendado para todas las edades?¿Qué consideraciones hay que tener en cuenta antes de echarnos a caminar?

Personas mayores haciendo treckking | Envato

Personas mayores haciendo treckking | Envato

¿Por qué el Camino de Santiago para mayores y jubilados?

El Camino de Santiago es más que una mera ruta de peregrinación; es una experiencia enriquecedora y transformadora que atrae a personas de todas las edades y procedencias. Para los mayores y jubilados, ofrece un abanico de oportunidades únicas y beneficios significativos que hacen que valga  la pena considerarlo como una aventura “post-retiro”.

En primer lugar, el Camino de Santiago es una forma maravillosa de mantenerse activo físicamente. Las caminatas diarias a lo largo de las diversas etapas, aunque pueden ser un desafío, contribuyen en gran medida a mejorar la salud física y el bienestar general. El simple acto de caminar regularmente puede aumentar la resistencia, fortalecer el sistema cardiovascular y mejorar la movilidad y flexibilidad, aspectos muy importantes en las etapas más avanzadas de la vida. 

Por otra parte y no menos importante, el Camino de Santiago ofrece una experiencia social única. A lo largo de las diferentes rutas, como peregrino, tendrás la oportunidad de conocer y entablar amistad con personas de todo el mundo, de diversas culturas y edades. Este intercambio cultural y generacional puede resultar enriquecedor, generando nuevas perspectivas y un sentido de comunidad que trasciende las barreras geográficas y lingüísticas. 

Por último es imposible no hacer mención al espacio para la reflexión personal y conexión espiritual que proporciona el Camino de Santiago. Para las personas que se encuentran en una etapa de retiro, es una época de transición y reevaluación. El ritmo pausado del Camino permite un tiempo valioso para la contemplación, para mirar hacia atrás en la vida con gratitud y hacia adelante con renovada esperanza y propósito. Algunos encuentran consuelo en la espiritualidad inherente al Camino, otros pueden encontrarla simplemente en la belleza y serenidad del paisaje circundante. 

¿Hay una edad recomendada para hacer el Camino de Santiago?

El Camino de Santiago, como ya sabes, es una aventura de peregrinación que principalmente recorre el norte peninsular (y muchas otras regiones) siempre con meta en Santiago de Compostela. Sin embargo no hay una sola ruta para recorrerlo, ni un punto de partida fijo; cada peregrino elige desde dónde camina, cuántas etapas hace y cuántos kilómetros recorre cada día, factores que hacen del Camino de Santiago una experiencia totalmente adaptable a cada tipo de peregrino. 

Por tanto, no hay una edad recomendada para hacer el Camino de Santiago: prácticamente todo el mundo puede hacerlo, desde niños a personas de avanzada edad, siempre teniendo en cuenta la preparación física de cada uno para adaptarlo a nuestras capacidades y por supuesto, a nuestro estado de salud. 

Camino de Santiago | Andrea Polidoro

Camino de Santiago | Andrea Polidoro

Elegir la ruta correcta: caminos menos exigentes

Para los mayores y jubilados que buscan emprender el Camino de santiago es crucial seleccionar una ruta que sea menos exigente físicamente, pero que aún conserve la belleza y la esencia del Camino. La elección de la ruta adecuada puede marcar una gran diferencia en tu experiencia y en la capacidad de completar el viaje con éxito y disfrute. 

El Camino Francés es, sin lugar a dudas, el más popular y el que más infraestructuras ofrece. Si buscas una opción menos exigente, el último tramo desde Sarria hasta Santiago de Compostela puede ser una opción excelente. Dicho tramo cuenta con 100km, pudiéndose completar en unas 5 o 6 etapas, presentando rutas de caminata moderadas y una buena abundancia de albergues y servicios. 

Otro camino que se adapta bien a los mayores y jubilados es el Camino Portugués, una alternativa que ofrece una gran variedad de paisajes, desde tranquilas rutas costeras hasta exuberantes bosques verdes, bastante completo si tenemos en cuenta albergues y otras infraestructuras. 

Por último, el Camino Inglés también puede ser una buena opción para quienes buscan un camino menos exigente. Aunque es uno de los caminos más cortos, con aproximadamente 120 km desde Ferrol, cuenta con una rica variedad de historia y cultura, llevando a los peregrinos a través de paisajes espectaculares y ciudades históricas.

Peregrinos | Envato

Peregrinos | Envato

Salud en el Camino de Santiago: Cuidado de los pies y nutrición

Cuando se habla de salud en el Camino de Santiago, dos aspectos fundamentales a considerar son el cuidado de los pies y la nutrición. Estos dos elementos son esenciales para poder completar con éxito y disfrutar del Camino, especialmente para los mayores y jubilados. 

Los pies son, literalmente, la base de esta peregrinación. Se deben tomar medidas para evitar ampollas, callos y lesiones. Una elección adecuada de calzado es primordial. Es recomendable usar botas o zapatillas de montaña, dependiendo de la época del año escogida para realizar el viaje. En general, las medidas a tener en cuenta es decantarnos por un calzado que cuente con un material que evacue la humedad y sea suave, evitando los roces. No debes olvidarte tampoco de hacer descansos regularmente, mantener los pies limpios y secos, así como usar crema hidratante o vaselina para prevenir ampollas. 

La nutrición es otro aspecto crucial. El Camino de Santiago exige un desgaste físico considerable, por lo que una dieta balanceada y nutritiva es esencial para mantener los niveles de energía y prevenir la fatiga. Se deben priorizar alimentos ricos en carbohidratos para proporcionar energía de liberación lenta, proteínas para ayudar a la recuperación muscular y frutas y verduras para asegurar una ingesta adecuada de vitaminas y minerales. No hay que olvidarse de la hidratación, especialmente durante los días más calurosos. 

Seguridad en el Camino de Santiago para mayores y jubilados

La seguridad en el Camino de Santiago es un aspecto primordial para todos los peregrinos, pero especialmente para los mayores y jubilados, quienes pueden tener consideraciones especiales de salud y bienestar. Uno de los aspectos primordiales es mantenernos siempre siempre en el camino marcado. Las rutas del Camino de Santiago están bien señalizadas con las icónicas flechas amarillas y las conchas de vieira, pero a veces pueden surgir confusiones. Es útil llevar un mapa o una guía actualizada, también siendo una opción viable una aplicación de móvil con la ruta. Salirse del camino puede llevar a situaciones peligrosas o desorientadoras, por lo que es importante tener siempre en mente este punto. 

Treckking | Envato

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Tener un plan de comunicación es vital. Mantente siempre informado con alguien de tu itinerario diario, ya sea un familiar o amigo en casa, o el personal del albergue en el que te estás quedando. Lleva siempre un teléfono móvil cargado para emergencias y asegúrate de que conoces los números de emergencia locales. 

¿Recuerdas cuando te hablábamos del Camino de Santiago como una experiencia ideal para compartir con otras personas? En la medida de lo posible, trata de viajar en grupo. Si no, intenta al menos mantener otros peregrinos a la vista. Los caminos pueden ser solitarios en algunos tramos, por lo que tener a alguien cerca puede ser de gran ayuda si te encuentras en apuros. 

El clima es otro aspecto que no debes dejar pasar por alto. Lleva contigo suficiente agua y protección solar en los días más calurosos, o abrigándote bien y cuidando de no resbalar en los días frías o lluviosos. Finalmente, y aunque el Camino de Santiago es conocido por su ambiente seguro y acogedor, es importante seguir las precauciones básicas de seguridad. Mantén tus pertenencias personales a la vista y seguras en todo momento, procurando de ser cauteloso a la hora de interactuar con extraños. 

Siguiendo estos consejos, puedes garantizar que tu viaje en el Camino de Santiago será una experiencia segura y gratificante. 

Senderismo | Envato

Senderismo | Envato

Consejos del Camino de Santiago para mayores

Los consejos del Camino de Santiago para mayores no difieren mucho de un peregrino algo más joven. Dicho lo cuál sólo deberás de prestar atención a tres puntos básicos que, en realidad, cualquier peregrino tendrá que cumplir para completar con éxito la ruta propuesta. 

Optar por el buen tiempo

Incluso en verano no estás exento de pasar por algún chaparrón en el Camino de Santiago, pero sin duda los días soleados serán los más predominantes; al igual que la primavera. Es por ello que los meses comprendidos entre abril y mayo, saltando directamente a septiembre, son los más recomendables. ¿El motivo? Temperaturas suaves y buena afluencia de peregrinos. 

Entrenamiento

El Camino de Santiago, aún tratándose de la ruta de Sarria, es una experiencia exigente, por lo que es recomendable estar bien preparado. Si ya tienes marcado en el calendario una fecha de inicio para la aventura, te recomendamos que al menos tres meses antes trates de prepararte bien físicamente, con caminatas que cada vez se hagan algo más intensas. 

Visita antes a un médico

Este consejo va de la mano del anterior, y es que la visita a un médico se presenta casi como obligada para los mayores. Ellos mejor que nadie sabrán valorar tu condición física y buscar alguna posible patología. 

Escoger la mejor ruta

Algo más arriba te hemos dejado algunas alternativas más que interesantes y muy sencillas para completar el Camino de Santiago para mayores. No obstante y en caso de que creas estar preparado, también puedes escoger rutas más atrevidas. Eso sí, siempre teniendo en cuenta tu condición física y la visita con anterioridad al médico. 

Senderismo | Envato

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Dudas que puedan frenarte y soluciones

"Creo que soy demasiado mayor para hacerlo"

En 2018, alrededor de un 20% de los peregrinos que recorrieron el Camino de Santiago tenían más 60 años, lo que incluye caminantes de 65, 70, 75 años o más. Los años no deben ser una barrera; la Tercera Edad además tiene la ventaja de poder elegir con mayor libertad que los demás cuándo queremos caminar. Podremos elegir para caminar la mejor época del año para hacer el Camino de Santiago, como abril, mayo o septiembre, aprovechando las temperaturas suaves, esquivando las masificaciones de peregrinos de verano y generalmente evitar los problemas de plazas en albergues en cada localidad en la que pernoctemos. 

"Quiero hacerlo, pero no tengo con quién"

Hacer el Camino de Santiago solo no debe ser un impedimento; de hecho siempre ha sido habitual ver caminando a peregrinos en solitario. La hospitalidad y sentimiento de fraternidad que existe en el Camino se traduce en que siempre estemos acompañados; es habitual terminar caminando con otros peregrinos que también han comenzado solos, entablar una buena relación y llegar a Santiago de Compostela juntos. Hacer el Camino solo nos da la flexibilidad de tener nuestros momentos de tranquilidad y reflexión, pero también de compañía si es lo que buscamos. 

"No gozo de buena salud"

La salud puede ser la mayor barrera -y el mayor riesgo- a la hora de emprender el Camino de Santiago. Sin embargo la última palabra la tiene que tener nuestro médico, al que debemos acudir para conocer en qué condiciones nos encontramos (después de pasar un reconocimiento médico), qué limitaciones tenemos y qué precauciones debemos tomar si tenemos finalmente el visto bueno. 

"Físicamente no sé si voy a estar a la altura"

La mayoría de nosotros no estamos acostumbrados a caminar 15 o 20 km a diario, por lo que todos los peregrinos necesitamos una preparación previa para ganar resistencia y poder afrontar las etapas. Nosotros te proponemos un ejemplo de preparación física para el Camino de Santiago y varios consejos, pero recuerda siempre acudir a tu médico para recibir asesoramiento

"No tengo experiencia haciendo senderismo"

¿Es recomendable experiencia en senderismo para hacer el Camino? Sí ¿Es imprescindible? Para nada; hay muchas rutas distintas para llegar a Santiago, todas con niveles de exigencia muy distintos. Si no tienes experiencia, aunque lleves a cabo una preparación física previa, lo más recomendable es que empieces por itinerarios de no demasiadas jornadas, con etapas que no impliquen muchos kilómetros de distancia por día.    

Camino de Santiago | Foto de Cory & Charlotte Jacobsen

Camino de Santiago | Foto de Cory & Charlotte Jacobsen

¿Qué edades tienen los peregrinos que recorren el Camino de Santiago?

Para demostrarte que la edad no es un factor importante a la hora de decidir si hacemos el Camino de Santiago, lo mejor es echar un vistazo a los últimos datos oficiales de afluencia de peregrinos disponibles, de 2018. Según las estadísticas de la Oficina de Atención al Peregrino, en 2018 un 55% de los peregrinos que llegarón a Santiago tenían entre 30 y 60 años (179.450 en total); un 27% eran menores de 30 años (87.843 peregrinos) y por último, un 18% eran mayores de 60 años (60.085 peregrinos).

Estos datos confirman la gran disparidad de edades de los peregrinos que recorren el Camino, indicando además que tener más de 60 años no es un impedimento real a la hora de decidirse. La barrera no debe ser nuestra edad, si no el estado físico en el que nos encontremos (debemos ser honestos con nosotros mismos) y nuestra salud. Por eso es muy recomendable prepararse físicamente antes de coger la mochila y los bastones y no olvidarse de hacer una visita al médico para pasar los chequeos oportunos.      

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