Derechos de los peregrinos

@ Vítor Mejuto

La protección del peregrino, con siglos de historia a las espaldas

La figura del peregrino ha sido históricamente protegida por las más altas instancias religiosas y monárquicas. Salvoconductos, cartas de recomendación y certificados expedidos por las propias casas reales y órdenes religiosas de diversas naciones permitían a los romeros transitar con relativa seguridad el Camino de Santiago; gracias a los duros castigos para aquellos que infligiesen alguna molestia o extorsión al peregrino, en una época en la que las continuas guerras asolaban el continente europeo. Los favores hacia el penitente religioso iban más allá, y se le eximía de portazgos y peajes, a la vez que se obligaba a prestarles hospedaje a cubierto.

De las marchas jacobeas se desprendió todo un cuerpo legal para incentivar el flujo de romeros, en pleno fervor religioso del catolicismo. Pero las leyes y ordenanzas dictadas durante el medievo tendrían, obviamente, a día de hoy, nula aplicación, cuando no se hubisesen tornado textos descabellados de ser transpuestos al marco vigente. Sin embargo, el poso acumulado durante siglos de jubileo ha creado un halo en torno al caminante, al que se le sigue mostrando deferencia, por norma general, allá por donde cruza la senda.

No obstante, existe la idea infundada de que los peregrinos gozan todavía de prioridad ante una urgencia sanitaria, pero no es así. De hecho, no existen protocolos específicos de actuación para la atención urgente de romeros en ninguna de las autonomías por donde discurre el Camino. Bien es cierto que, por motivos de funcionalidad y por condescendencia, sí se trata de atender lo más rápido posible al romero, para que pueda así continuar la marcha.

Camino de Santiago

Desayuno, comida y cena en Compostela

Entre los escasos derechos que conserva el peregrino se mantiene el de recibir hospitalidad, aunque los hospitales atendidos antaño por religiosos son puras ruinas o hayan desaparecido. La tradición perdura en el Hostal dos Reis Católicos, junto a la catedral de Santiago; como antigua institución hospitalaria ofrece a los romeros diez desayunos, diez comidas y diez cenas, totalmente gratuitas, una vez que hayan presentado la credencial de haber completado el Camino. A menudo se las suelen sortear los mismos romeros que hacen cola ante el edificio de la plaza del Obradoiro.

La red de albergues del Camino de Santiago

Sea cual fuere la ruta elegida para completar el Camino a Compostela, habrá de tener en cuenta el peregrino el acceso a los albergues públicos. Gozan de privilegio los primeros en llegar a sus puertas, e impera la figura del romero pedestre sobre el ciclista o el jinete. Estos dos últimos deberán ceder su plaza en caso de completarse el hospedaje y quedar fuera algún caminante. Particular es el caso del Camino Portugués a su llegada a Tui, en la frontera entre Galicia y Portugal. Los romeros llegados de tierras lusas tendrán prioridad para acceder a una cama en el albergue tudense.

Seguro del peregrino para imprevistos

El organismo Turismo de Galicia ha autorizado a la compañía Europ Assistance a comercializar un seguro bajo el distintivo de Xacobeo. Se trata de un producto innovador, que da cobertura a romeros de cualquier parte del mundo que realicen el Camino de Santiago, tanto a pie como en bicicleta. La asistencia puede contratarse en español, inglés, francés, alemán, italiano y portugués. Contempla apartados tales como traslado de bicicleta en caso de enfermedad sobrevenida o accidente, bicicleta de sustitución y garantías por pérdida o daños de material deportivo. La póliza ofrece a todos los asegurados tanto asistencia en viaje, como traslado a Santiago en caso de enfermedad o accidente, servicio de intérprete, prolongación de estancia en hotel, servicio de información, cobertura sanitaria y garantías ante el robo o pérdida de tarjetas de crédito.